El día 23 de marzo de 2013, integrantes de Ecologistas en Acción Silvema Serranía de Ronda, FAADN y de SEO Ronda, localizamos en la zona de El Chorro (Ardales) tres ejemplares de Buitre leonado (Gyps fulvus) muertos por electrocución bajo una línea de alta tensión. Se ha realizado la pertinente denuncia a la Consejería de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente y a la compañía eléctrica Sevillana-Endesa para que se adopten las medidas necesarias de aislamiento o corrección del tendido.
Silvema Serranía de Ronda trabaja activamente desde hace muchos años en la detección y eliminación de los puntos negros para la avifauna en los tendidos eléctricos de nuestra comarca.
Si encuentra cualquier ave muerta cerca de un poste de alta tensión, rogamos que contacte urgentemente con nuestra asociación.
ACTUALIZACIÓN DE LA INFORMACIÓN A 20/06/2013 AL FINAL DE ESTE ARTÍCULO



ACTUALIZACIÓN DE LA INFORMACIÓN A 20/06/2013
Gracias a la presión realizada por nuestra asociación, ENDESA ha corregido los dos apoyos situados en las cercanías del Embalse de la Encantada, causantes de la muerte de al menos cuatro ejemplares de Buitre leonado (Gyps fulvus). El método empleado ha sido el aislamiento de los conductores, el cual actualmente es el sistema de corrección que ofrece mejores garantías. Sin embargo en uno de los apoyos, que tiene un diseño un poco más complejo que el simple puente (tiene seccionadores de cuchilla) el resultado no lo consideramos cien por cien satisfactorio, tanto por las partes desnudas del seccionador como por la pequeña longitud de manguera aislante empleada (siendo este material la parte menos costosa del montante total de la corrección). Esperamos que los técnicos dispongan de más información que nosotros al respecto y puedan asegurar que con esta corrección no se producirán más muertes en este apoyo. Solo resta mantener en buen estado de conservación las protecciones instaladas, si bien no nos constan datos históricos sobre la vida en condiciones reales de estos materiales plásticos, al ser relativamente reciente su empleo de forma habitual, estimamos una vida útil de las protecciones de más de diez años.
También se ha actuado sobre un transformador cercano, una de las instalaciones eléctricas que son de alto riesgo para las aves. Confiamos en que se siga actuando sobre la línea completa, dado que en esta zona hay nidificación, alimentación y campeo de numerosas grandes rapaces.

